A propósito de la Caravana que avanza hacia los Estados Unidos

                                            Fuente EPA

Este lunes el presidente de los Estados Unidos Donald Trump se manifestó en la red social Twitter en contra de la caravana de migrantes que partió el 13 de octubre de Honduras, compuesta por unas 7.000 personas según la ONU y que actualmente avanza por el estado de Oaxaca, en el sur de México.

"Por favor, regresen, no serán admitidos en Estados Unidos a menos que pasen por el proceso legal. ¡Esto es una invasión de nuestro país y nuestros militares los están esperando!", agregó.

Sin embargo, es evidente la situación social y económica que vive actualmente Honduras y ciertos países de Centro América, que ha llevado a miles de personas a abandonar sus hogares y sus familias en busca de oportunidades y al menos una condición segura donde sus vidas no corran peligro. La gente está cansada de la pobreza y la violencia.

Algunos activistas se han referido al tema, como es el caso de Irineo Mujica, director de la ONG Pueblos sin Frontera, indicando que "Esto no es una caravana, es un éxodo creado por el hambre y la muerte".

Pese a las precarias condiciones de quienes avanzan hacia Estados Unidos, que una vez llegada la noche duermen con sus niños pequeños sobre el pavimento, tienen las caras llagadas, los pies con ampollas ya que caminan kilómetros y kilómetros cada día y comen lo que la gente les regala a lo largo del camino, unas horas después del mensaje de Trump, el Pentágono anunció que 5.200 efectivos del ejército de EE.UU. llegarán esta semana a bases de la frontera para el "endurecimiento" de la seguridad de la zona.

Nuestra Organización Internacional para la Defensa de los Derechos de los Refugiados WECAN - OIDDR hace un llamado a los organismos como la ONU y a los gobiernos de los países implicados para garantizar las condiciones de quienes sin mas alternativa han renunciado a todo lo que han construido para salvar sus vidas y las de sus familias.

Fuente BBC